domingo, 5 de octubre de 2008

A MARTA; GRAN AMIGA Y GRAN HERMANA

Desde mi estancia en Barcelona he conocido a muchas personas de diferentes nacionalidades, todas ellas en general con un nivel cultural y académico exquisito. Pero he de confesar el cariño especial que tengo a Colombia y su gente, quienes con los peruanos, compartimos no sólo una intensa historia sino también un gran patrimonio cultural. Por caprichos del destino, desde hace dos años, tuve el privilegio de conocer a una gran artista, mujer, persona y madre; colombiana ella; escritora, lingüista además de antropóloga, una excelente poeta. Esta excepcional mujer es nada más y nada menos que Marta Cedeño Pérez. http://espaciosyperiferias.blogspot.com/ Martita, como yo la llamo, me ha brindado la oportunidad de empezar a cultiva una con ella sólida amistad; amistad que con el paso del tiempo se ha ido fortaleciendo, hasta el punto de sentirnos hermanas y no sólo hermanadas por las raíces latino americanas que tenemos en común. Tanto Marta como yo, tenemos compartimos sueños, espacios, alegrías, emociones, esperanzas. Queremos ser respetadas como mujeres, personas y profesionales en el país que hoy por hoy nos acoge. Deseamos volver a ocupar en ésta sociedad el lugar que nos pertenece como ciudadanas, lugar para el que nuestros padres y países de origen invirtieron tiempo, esfuerzo y dinero. Marta y yo, somos como dos almas gemelas, nuestro carácter tienen muchos puntos de confluencias, pero cada una tiene una personalidad muy bien definida. Nos caracteriza el ser dos grandes luchadoras ante los avatares de la vida, el luchar por nuestros derechos y dignidad. Peso si algo he de resaltar y agradecer de ella, es uno de los aspectos más valiosos que pueda resaltar, la confianza en mi persona, la confianza depositada en mi persona hasta el punto de que me haya abierto las puertas de su casa para hacerme partícipe como si fuera un miembro más de su familia y sobre todo; el de confirme el retoño de su amor; su pupila, su alma, alma que la devuelve a la vida todos los días en su despertar y que es Luna, su bella Luna del Mar.
Marta, gracias por confiarme a tu niña, gracias por querer ser mi familia, gracias por ser ante todo una amiga.
Isabel Gómez

2 comentarios:

Martha Cecilia Cedeño-Pérez dijo...

Isa, gracias por tus palabras que no merezco. Tu eres un alma bella y transparente. Uno de esos seres hermosos que devuelven la esperanza en el género húmano, la confianza en la humanidad. Y si eres mi amiga-hermana porque te quiero, te respeto y admiro tu lucha constante contra la adversidad. Eres también mi compañera cotidiana de ilusiones y palabras y risas y sueños. Y también te quiero porque quieres a Luna, el universo que sustenta mis días. Gracias a ti por tu solidaridad, por tu amistad, por tu voz plena y sincera.
Un abrazo fuerte.
Martha

María Isabel Gómez Castillo dijo...

Mi Martita querida, gracias por tus palabras, sólo quería resaltar algunas de las características y vivencias que nos unen, porque tú te mereces más y sobre todo más como gran escritora y poeta que eres. En cuanto a ello me reservo los comentarios porque aunque publicas en tu blog muchos de tus trabajos ya dejar entre ver parte de tí; espero tu siguiete libro para adentrarme en la Marta que pocos logran descubrir.
Sabes que os quiero mucho.
Isabel