Tengo pendiente una ratificación de diagnóstico de Síndrome de fatiga crónica, que, como fatiga, es síntoma de la Fibromialgia. A que a nivel físico no la presento de manera acusada, salvo no tenga un sueño reparador; sin embargo, sí arrastro una secuela de fatiga a nivel mental desde hace dos años, que no ha remetido en algunas áreas de parte de todos los procesos cognitivos que nuestra mente es capaz de realizar. Esta secuela, está principalmente vinculada a la atención, memoria inmediata, percepción de información, tiempo de retención de información y a veces en la elaboración del lenguaje escrito: mi mente piensa y ve una cosa, escribe lo que cree, pero en la realidad, revisado por otros, no siempre puede estar reflejado de manera textual lo que yo he escrito. Por ello, hay artículos que los dejo reposar, para poder identificar los fallos de redacción o gramaticales. A veces, ni aún así. Lo que sí es cierto, es que esta capacidad de memoria mejora, cuando he de aprender cosas nuevas o conceptos que se pueden aplicar a la práctica o tienen algún vínculo emocional, sensorial, o está relacionado con mi algún hecho de mi vida pasad.
A nivel emocional, todo bien, soy consciente que quienes padecemos esta enfermedad, tenemos un nivel de ansiedad por encima del que suelen tener las personales que no presentan este problema y que se encuentran dentro de los estándares no patológicos de ansiedad. Lo cierto es, que aunque se manejes o se controle la misma, siempre será superior a la media. Por lo que sólo a veces se puede llegar a identificar conscientemente, cuándo ésta, ha superado los umbrales naturales e individuales de cada persona llegando a romper el equilibrio interior, el que se hace evidente con sintomatologías propia de la enfermedad, siendo una de ellas el dolor o el cansancio en general.
Lo más importante, es cómo cada uno afronta su realidad individual.
En mi caso, aparte de vigilar por mi alimentación y hacer todo lo posible de llevar una vida activa tanto a nivel mental como física, recurro a técnicas de soporte psicológico que me ayuden a detectar los cambios en mis estados emocionales, lo que generan esos cambios, lo que afecta en mi salud y tomar medidas, tanto a nivel de la medicina preventiva como de cualquier otro tipo de actividad preventiva.
Gracias a ello, pese a todas las situaciones personales que vengo experimentando en estos últimos años, he desarrollado recursos personales, y potenciado otros tanto cognitivos como personales, para afrontar la enfermedad y a ser posible, hacer de una posible recaída brusca, el que se produzcan conatos de recaídas paulatinos, descansarlos, y volver a mi día a día.
Ello me ha reportado varios beneficios, siendo el más importante, estar atenta a los cambios de mis biorritmos para identificar qué es lo que necesita, complacer a mi organismo en general y llevar dentro de toda mi realidad individual una vida medianamente normal.
Es un trabajo intenso, que está en mis manos, parte de mí, y lo realizo y dirijo en primera persona. Según los momentos, busco la formación idónea, que me aporte más herramientas externas de autocontrol. Lo cierto, es que con el paso del tiempo, voy llegando a una conclusión: el estar mejor o peor, depende de mí.
Mi actitud de cara a la enfermedad ha cambiado radicalmente, de cara mi red social también. Tengo el privilegio, de tener amigos, íntimos y buenos amigos, ser apreciada y respetada por diversas personas y entorno, dándome todo ello, la oportunidad de ser solidaria con quienes necesitan compartir una experiencia personal a la vez que comparto la mía, recordando en todo momento, que cada uno es como es, que los recursos están en sí mismos, y que sólo se puede compartir y crecer en compañía, con quienes queremos crecer. Para ello, es importante, el saber compartir, asumir, resolver y tomar un compromiso de cambio.
Yo lo estoy haciendo, acompañada de amigos y sobre todo de mi constancia, fuerza, fortaleza y decisión.
Fernando de CINÉTICA, gracias por tu pregunta, porque ampliada y corregida, me ha dado pié, para este testimonio, el que he deseado compartirlo con los amigos y seguidores de este espacio.
Isabel Gómez