Hay momentos en la historia personal de cada ser humano, que por diferentes circunstancias, un muro en su vida cae. Es entonces, cuando la esperanza aparece, para alcanzar la tan añorada libertad.
Hay muchos tipos de muros que rodean a la persona, pero sobre todo, hay muros, que son impuestos y otros creados por ella misma.
Es ahí cuando hay que discernir.
Un muro creado por la persona misma, está vinculado a los esquemas mentales que pueda tener, a su historia personal, a su forma de percibir la vida, entre otros aspectos, por lo que es imprescindible que estos, sean tumbados en primer lugar.
Una vez libre de una carga individual, con un estado emocional más ligero, es más fácil recuperar la perspectiva e ir en busca del derrumbe de los muros impuestos: estos, pueden ser impuestos, por la sociedad, la familia, el entorno laboral, los amigos, etc. Lo que importa, que es analizar cuál de todos es el más ligero y frágil, para lanzarlo a tierra, y luego continuar con los demás, que no son más que obstáculos que limitan la visión, la razón, la conciencia, las emociones, las sensaciones, incluso la vida en general en sí.
En conclusión, derribar muros individuales, requiere: analizar, elaborar un diagnóstico, elaborar objetivos, proponer soluciones, actuar y finalmente realizar un seguimiento; si fuese necesario, replantear los objetivos a nuevas necesidades y realidades: flexibilidad.
Foto: Izquierda, Muralla Romana al costado de la Plaza de Catedral.
Foto: Derecha, Columna con Muralla Romana, hacia la izquierda de la Catedral
Foto: Inferior centra: Arena en Playa de Castelldefels
Autora: Isabel Gómez Castillo
1 comentario:
ay amiga!!!!
hay muros mas dificiles de derribar que el desamor y el maltrato??
doy gracias a dios, que me ayudo a derribar los mios....
besote gigante y un gran abrazo de oso
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