Me haces tuya desde el silencio
y me abrazas con tu furtivo corazón.
Desde la distancia me consuelas
haciéndome paisaje fresco y florido del
Ebro.
Me haces reposar ligera,
en extensos campos de Narcisos blancos
de corazones amarillos bordados en
intenso rojo,
y entre Amapolas despiertas al sol.
Me haces Oasis en cielos vivos con nubes
que se besan
mientras Tú, te conservas Gruta cierta
para mi corazón.
Me haces música sonora
entre calmados bosques boreales
siberianos,
mientras que Tú, viento, me fragmentas
y como halo me paseas por tus galerías
ocultas.
Me haces tuya, como la Luna al Mar
mientras, me transformas en aromas
de Lavanda, Vainilla y Moka,
para tu Fosa de la Marianas
en donde te encuentro Sereno
entre Lilas, Girasoles, Zarzamoras.
Me haces entre lo inhóspito y lo
recóndito
entre lo lógico e irracional.
Porque Tú, sólo Tú me haces,
y me haces solo Tú.
Haciéndome sólo tuya a la vez.
María Puccio
Fotografía de María Puccio
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