Retomando la primera parte del tema, es de reconocer que sí, hay muchas personas que desean superar cualquier tipo de dolor una vez pasado una etapa de duelo, de un trabajo persona de descubrimiento de nuevas herramientas y elementos que se pueden potenciar de su persona, conciliándose consigo mismo, con su dolor y en sus relaciones con los demás, reconociéndose como un ser productivo que con su testimonio y experiencia deja muestra de que sí, es posible romper con esquemas mentales.
Con ello deja constancia que los temores personales, una vez contrastados, llevan a la persona a cambios de actitudes, ampliando su visión del mundo.
Una experiencia como ésta, puede ser vivida de manera compartida o individual.
La visión y percepción del dolor, se puede cambiar. A veces, es necesario buscar ayuda profesional para tener un reencuentro uno mismo; es imprescindible valorar el estado estados emocional en el que la persona se encuentra, que aprenda a percibir sus sensaciones, a reconocer sus estados racionales, y encontrar en sí misma, una fuente de renovación.
Es imprescindible, que primero se vea el dolor, se asuma, y sobre todo, se quiera aprender a vivir con él. Ésta es una experiencia única muy íntima, persona e irrepetible.
Cuando se tiene una experiencia de haber superado esta dependencia y generación de dependencia, el ser humano aprende a sentir la libertad como una parte vital de su vida. Por ello, ha de aprender a cuidar y valorar su intimidad, a cuidar y valorar su entorno.
En conclusión, cuando la persona rompe con la monotonía de querer sentirse un ser inferior, minimizándose a sí misma, genera una desestabilización en su entorno hacia un estado positivo generando en primera persona, un estado de bienestar, la opción de potenciar nuevas habilidades para afrontar el presente, proyectándose hacia el futuro con acciones concretas para alcanzar sus objetivos gracias a las herramientas descubiertas rescatadas, algunas de ellas, probablemente de sus experiencias pasadas, observadas como experiencias positivas.
Esta experiencia, conlleva un largo camino, pero lo principal de todo, es quiere hacerlo.
Isabel Gómez
Foto 1: Árbol, tras el vendaval que azotó Barcelona en 02, 2009. Autora: Isabel Gómez Castillo Foto 2: Puerta en el Parque del Laberinto de Barcelona. Aurotra. Isabel Gómez Castillo
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