Detrás del Museo Nacional de Arte de Cataluña siguiendo el camino hacia la derecha se encuentra el antiguo Jardín Botánico de Barcelona, Situado en el parque de Monjuïc.
Este Jardín, es pequeño pero acogedor.
Isabel Gómez
Autora de todas las fotos de este artículo: Isabel Gómez Castillo
Conserva plantas procedentes de Sud-África, La Mediterránea Occidental, La Mediterránea Oriental, Chile, Australia. Aunque también se encuentran algunas especies de Japón, Argentina, entre otros países.
Comparable a un oasis en medio del desierto, perfecto para retirarse dentro de la misma ciudad y escapar del murmullo y la monotonía; constituye un espacio de esparcimiento a la vez que de recogimiento. Brinda un respiro físico y mental, dentro del cansancio que implica subir la montaña de Monjuïc para conocer a fondo todo su atractivo turístico.
El antiguo Jardín Botánico de Barcelona, fue creado en 1930 por el Dr. Pius Font i Quer en los terrenos denominados las canteras de la Foixarda de Monjuïc. Por las obras que se realizaron para crear la nuevas infraestructuras para las Olimpiadas de Barcelona celebras en 1992, este Jardín sufrió graves daños lo que motivó su cierre por seguridad hasta el 2003, año en que finalmente fue reabierto.
Esta primavera, está siendo generosa y bastante típica, lo que permite realzar la frondosa belleza de sus plantas y flores, así como la fugacidad de las mismas, debido a la fragilidad de su belleza natural. Este, es la mejor temporada para visitarlo, al igual que en otoño.
El antiguo Jardín Botánico de Barcelona, fue creado en 1930 por el Dr. Pius Font i Quer en los terrenos denominados las canteras de la Foixarda de Monjuïc. Por las obras que se realizaron para crear la nuevas infraestructuras para las Olimpiadas de Barcelona celebras en 1992, este Jardín sufrió graves daños lo que motivó su cierre por seguridad hasta el 2003, año en que finalmente fue reabierto.
Esta primavera, está siendo generosa y bastante típica, lo que permite realzar la frondosa belleza de sus plantas y flores, así como la fugacidad de las mismas, debido a la fragilidad de su belleza natural. Este, es la mejor temporada para visitarlo, al igual que en otoño.
Isabel Gómez
Autora de todas las fotos de este artículo: Isabel Gómez Castillo
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